Igual que en la Edad Media, cuando los reyes franceses acudían a la basílica gótica de Saint Denis, dos equipos se verán las caras en el estadio de esa ciudad -fundada en el siglo II d.C, para dirimir el ganador de la UEFA Champions League.
Morir es solo cuestión de estar vivo, pero no todas las personas fallecen plácidamente, entre ellos los futbolistas, algunos de los cuales pasaron a la otra cancha de manera trágica.