No quiero ser ave de mal agüero pero la muerte podría sorprendernos a la vuelta de la esquina. Desde luego, es mi deseo que su vida se proyecte hasta donde la longevidad le dé respiro.
Rico y famoso a punta de martillo, como Thor. En el camino conoció -tres veces- a Dios, trabó amistad con Jesucristo, partió el pan con el apóstol San Pablo, fue la putiamante de Luis XV, y tuvo tiempo de matar al faraón Tutankamon.