El proyecto de ley que prohibiría las terapias de conversión sexual en Costa Rica violenta las libertades más elementales, de acuerdo con David Segura, diputado de Nueva República.
Para el legislador, toda persona que sea homosexual tiene el derecho a recibir tratamiento y consejería espiritual si así lo desea.
Es por ello, que Segura se opone al plan que propone el Frente Amplio y que, según él, no es otra cosa que una mordaza.
“Lo que quieren es silenciar a todo el pueblo cristiano y también a los psicólogos, porque si una persona tiene derecho en Costa Rica a ser homosexual, también tiene derecho a pedir ayuda y consejería a los líderes religiosos si quieren dejar de ser homosexuales”, dijo Segura.
La iniciativa se encuentra en la recta final de su trámite, pero enfrenta la oposición del Presidente Chaves y del partido conservador Nueva República.
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