RECOPE insta a la ciudadanía a denunciar cualquier sospecha de robo, daño o transporte ilegal de combustibles a la línea confidencial: 1-0-0-2.
Según indicó la refinadora, gracias a varias denuncias relacionadas con personas transportando combustible -en pichingas, tanquetas y camiones- o por olor a combustible en alguna propiedad, ha sido posible detener a los delincuentes.
“Un gran aliado ha sido la promulgación de la Ley No.9852, para sancionar el robo y transporte ilegal de combustibles con penas de cárcel de hasta 15 años. Los Tribunales de Justicia han sentenciado a 14 personas con penas de prisión por este delito” enfatizó RECOPE.
Año de mayor afectación: 2018
El 2018 fue el año con mayor registro de tomas ilegales de combustible. El robo ascendió a casi 8 mil metros cúbicos.
Según datos del Departamento de Trasiego, para este 2022, esa suma se redujo en un 86%. A setiembre, el volumen sustraído es de 1.065 metros cúbicos.
Implicaciones del robo de combustible, más allá del factor económico:
- Exponer la vida de los vecinos, al peligro que representa la manipulación irresponsable del material inflamable y el almacenamiento en viviendas, predios y camiones.
- Afectar la continuidad en el suministro de combustibles en el país, provocando desabastecimiento.
- Contaminación al medio ambiente, daños a la biodiversidad y afectación a la salud de las personas, por la contaminación de mantos acuíferos.
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