El empresario y dueño de Pedregal, Rafael Ángel Zamora, exigió públicamente el pago de ¢300 millones al partido Nueva República.
En su comparecencia ante la comisión investigadora de financiamiento de los partidos políticos, Zamora explicó que él firmó un pagaré con ese partido y, tras finalizar el proceso electoral, los representantes de Nueva República sostienen que el acuerdo fue parte de una negociación de bonos de deuda política tipo B.
En ese sentido, la diferencia entre las partes implica una especie de estafa, y por ello, el empresario presentó una denuncia ante el Ministerio Público.
“Eso no tiene ningún valor y, perdón lo que voy a decir, pero vale más un rollo de papel higiénico de baja calidad que los bonos de deuda política. Eso nunca ha funcionado. Los bonos B difícilmente alguien los paga, sería ingenuo o malintencionado pensar que alguien pueda recibir eso como una garantía de pago”, expresó Zamora.
El empresario también señaló que el pagaré con Nueva República fue firmado a finales de diciembre del 2021, cuando ese partido tenía problemas para pagar los gastos de campaña. Zamora insiste en que se trató de un pagaré y no de bonos de deuda política.
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