Por Redacción. Esta nota fue elaborada con asistencia de IA
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El presidente salvadoreño, Nayib Bukele, se reunió este lunes con Donald Trump en la Casa Blanca ,y reafirmó su disposición de apoyar al gobierno estadounidense en materia de seguridad y migración.
“Estamos muy contentos y tenemos muchas ganas de ayudar”, afirmó Bukele, quien ha permitido el encarcelamiento de migrantes deportados por Estados Unidos, bajo la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798.
Según la Casa Blanca, el gobierno salvadoreño ha recibido más de $6 millones para albergar a los primeros 200 migrantes deportados.
Durante el encuentro, el mandatario estadounidense aseguró que enviará “tantos como sea posible”, sin descartar expulsar ciudadanos norteamericanos.
El secretario de Estado, Marco Rubio, defendió la negativa de repatriar al migrante Kilmar Ábrego García, pese a la orden judicial.
“Ningún tribunal tiene derecho a dictar la política exterior de Estados Unidos”, sentenció Rubio ante la prensa.
Bukele respondió que no tiene poder para enviar al migrante de vuelta: “¿Como si lo hiciera entrar clandestinamente? No puedo”.
Trump describió a Bukele como “impresionante” y bromeó: “Parece un adolescente”; recordó conocerlo desde que era muy joven.
El Salvador paga un arancel del 10% por sus exportaciones a EE.UU. como parte de la política de relocalización comercial impulsada por Trump.
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