Costa Rica recibió, del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), una cooperación técnica no reembolsable por US$550,000, para apoyar la integración de la acción climática en la política, y la gestión fiscal de los ministerios de Hacienda y Planificación.
Estos recursos permitirán -según Francisco Javier Urra, del BID- lograr los objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y el Acuerdo de París (AP).
Dichos pactos establecieron un compromiso para cambiar los actuales modelos económicos y sociales hacia un desarrollo sostenible, resiliente y con cero emisiones de carbono, agregó el representante del BID.
“Esto posiciona al país, como un puntero de las buenas prácticas internacionales, al incorporarlas a su gestión fiscal”, afirmó Urra.
Al respecto, Nogui Acosta -jerarca de Hacienda- explicó que los fondos servirán para implementar “instrumentos y metodologías de gestión fiscal verde, así como al conocimiento e intercambio de buenas prácticas para fortalecer las capacidades institucionales”.
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