Un accidente de un camión que transportaba trabajadores de los cañales turrialbeños fue el escenario que se organizó para llevar a cabo un simulacro en el servicio de emergencias y sala de operaciones del nuevo hospital William Allen Taylor.
El hospital activó su plan de emergencias masivas y fue recibiendo una a una las ambulancias con las víctimas.
Albert Méndez, director de la Red de Prestación de Servicios de Salud Central Sur (DRIPSSCS) explicó que, esta actividad permitió a los funcionarios, conocer la nueva infraestructura y medir todos los detalles necesarios para la marcha del hospital.
Las distancias por carretera, las entradas y salidas de las ambulancias, los parqueos, la distancia de los diferentes aposentos dentro del hospital -como salones, salas de shock, consultorios, espacios de los pasillos y salas quirúrgicas-; fueron parte de la gran cantidad de detalles que se probaron.
“A pesar de que el centro hospitalario está construido con todas las normas internacionales, es necesario realizar estas actividades para ver la respuesta que el hospital le puede dar a una emergencia como esta y a cada una de las personas atendidas” agregó Méndez.
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