Por Redacción. Esta nota fue elaborada con asistencia de IA
Durante abril debe cumplirse la declaración anual del Registro de Transparencia y Beneficiarios Finales (RTBF), con plazo máximo al 30 de abril.
Este documento fiscal permite identificar a los beneficiarios finales de personas jurídicas, y combatir legitimación de capitales y financiamiento al terrorismo.
También busca reflejar la verdadera capacidad económica de los obligados tributarios, según el Ministerio de Hacienda.
La obligación aplica a asociaciones solidaristas, cooperativas, fideicomisos privados y organizaciones sin fines de lucro.
Incluye también a sociedades inactivas que posean activos como casas de habitación o terrenos.
El incumplimiento genera multa del 2% sobre los ingresos brutos del período fiscal anterior; mínimo de ¢1.386.600 y máximo de ¢46.220.000.
Además, el Registro Nacional negará certificaciones e inscripciones a quienes no cumplan con esta declaración anual.
Notarios deben advertir en documentos si la persona jurídica no ha presentado la declaración del RTBF correspondiente.
El trámite se realiza únicamente mediante la plataforma Central Directo, del Banco Central de Costa Rica.
Hacienda insta a cumplir en tiempo la declaración para evitar sanciones económicas y limitaciones legales o registrales.
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